Un polígono de mejillón de la ría de Arousa, el de Cambados A2, ha sido reabierto para la extracción después de dos semanas en las que todas las bateas de Galicia han estado clausuradas por la presencia de biotoxinas.
Asimismo, otro polígono de la ría de Arousa, el de A Pobra C, ha obtenido sus primeros negativos de toxina, que deberán confirmarse antes de proceder también a su apertura.
En concreto, desde el 30 de junio, día en el que se cerró el polígono de A Pobra A permanecían cerradas todas las bateas gallegas por una aparición masiva de toxina lipofílica, la diarreica, lo que ha llevado a un desabastecimiento de producto autóctono en los mercados.