El Depósito Franco, ubicado en el Puerto de Coruña, y destinado a almacenamiento y gestión de mercancías con ventajas fiscales y arancelarias, ha puesto en marcha un novedoso sistema para cargar mercancías directamente en contenedores dentro de las propias instalaciones. Este sistema no sólo supone una reducción de costes y tramitaciones, sino que permite a los empresarios del área coruñesa despachar directamente sus mercancías en grandes cargas desde el Puerto de Coruña.
La implantación de este sistema ha implicado la ejecución de obras de habilitación en las instalaciones del Depósito Franco, para permitir el acceso directo a la nave de los camiones portacontenedores. También se ha adquirido una nueva maquinaria específica para estas grandes cargas que hasta el momento tenían que ser trasladadas en camiones a los contenedores. Los nuevos vehículos especiales tienen una medida exacta para introducirse dentro del contenedor, donde deslizan la mercancía, admitiendo cargas de gran volumen.
De este sistema pueden beneficiarse todas las empresas exportadoras de mercancías, ya que tienen la opción de utilizar el servicio tanto en solitario para sus propios productos como ocupando contenedores en conjunto con otras empresas. La comodidad, usabilidad y autonomía que implica este nuevo sistema supondrá un revulsivo para despachar mercancías desde Coruña, apoyando de ese modo las iniciativas empresariales encaminadas a la exportación, que constituye uno de los objetivos prioritarios de la Autoridad Portuaria en su apoyo al tejido empresarial de su entorno. Además, las empresas que utilicen este servicio se verán beneficiadas por las ventajas arancelarias y fiscales en los impuestos a los que están sometidas sus mercancías, al ser el Depósito Franco una parte del territorio aduanero comunitario.
El Depósito Franco de Coruña está constituido por el Ayuntamiento, la Diputación de Coruña, la Cámara de Comercio y la Autoridad Portuaria, y ha registrado en el último año un notable incremento de clientes que utilizan las instalaciones para el almacenamiento, manipulación o clasificación de todo tipo de mercancías, independientemente de su cantidad, origen, destino o naturaleza. Al estar ubicadas las instalaciones en el propio puerto, concretamente en la tercera línea del Muelle de San Diego, se favorece la transmodalidad por carretera, ferrocarril y transporte marítimo. Otra iniciativa del Depósito Franco es ofrecer una oportunidad a los nuevos emprendedores, por lo que ha puesto a disposición alquileres de locales para oficinas a precios muy competitivos.
Más de 4.000 metros de superficie
La superficie del Depósito Franco asciende a 4.000 metros cuadrados, repartida en tres naves comunicadas interiormente y con acceso exterior en cada una de ellas. El espacio se puede alquilar tanto por metros cuadrados como por volumen de mercancía y los clientes pueden beneficiarse de servicios de carga, descarga y custodia, eliminando de ese modo costes indirectos de personal, mantenimiento o suministros.
Las mercancías pueden permanecer por tiempo ilimitado en el Depósito Franco, donde es posible también proceder a su manipulación, desde reetiquetado hasta cualquier tipo de modificación para adecuarse a procesos como la puesta en conformidad en inspecciones, controles y homologaciones conforme a la normativa europea, en el caso de actividades de importación. Para ello, se ha habilitado un espacio de 65 metros cuadrados en el que se pueden instalar mesas de trabajo, máquinas de coser, etiquetadoras u otra maquinaria.