Lugo se ha convertido en el centro político desde antes del 24-M. Primero, los grupos minoritarios obligaron a renunciar al acta de concejal del alcalde en funciones, Xosé López Orozco; y segundo, un ‘tamayazo’ del regidor socialista de Becerreá facilitó la presidencia de la Diputación al PP. Pero este terremoto político continúa en la ciudad de las murallas. PSOE y Lugonovo no pudieron llegar a un acuerdo este lunes sobre la reducción de gasto público. Un capítulo que incluía el reparto de las dedicaciones exclusivas. Lugonovo exigía, para respaldar a los socialistas, pasar de trece a siete dedicaciones exclusivas: cinco para el PSOE y dos para la formación emergente. Los socialistas no aceptaron la aritmética propuesta por Lugonovo, por lo que la negociación se ha roto y todo apunta a que el grupo que ahora lidera Lara Méndez tendrá que gobernar el Concello de Lugo en minoría.
A las primeras de cambio se ha roto el "noviazgo" de "conveniencia" en Lugo. Las negociaciones entre PSOE y Lugonovo para la formación de un gobierno de "coalición" en el Concello de Lugo quedaron rotas en la tarde de este lunes al no aceptar los socialistas la exigencia de reducción de gasto político que reivindicaba la formación emergente.
En concretpo, Lugonovo planteaba reducir de trece a siete las dedicaciones exclusivas de los políticos, de las que cinco serían para el PSOE y dos para Lugonovo, cuando la relación de concejales es de ocho a tres.
Los socialistas estaban dispuestos a hacer una reducción pero no en esa medida y en esa proporción. Su oferta era dar a Lugonovo dos de los ocho representantes de la junta de gobierno. La formación que lidera Santiago Fernández Rocha tampoco aceptó y las negociaciones quedaron rotas.
Así las cosas, la alcaldesa, Lara Méndez, tiene previsto presentar este martes su propuesta de organización del gobierno y de reducción del gasto político.
