La Asamblea Aberta de Coia ha acudido este miércoles a los juzgados vigueses para personarse en el acto de conciliación previo a la interposición de una querella contra la teniente de alcalde de Vigo, Carmela Silva, a la que reclama un total de 78.000 euros por haberles llamado "nazis" y “violentos” a través de un mensaje en una red social.
En dicho mensaje, Silva acusaba a los "anti-Alfageme", en alusión a quienes se oponían a la colocación del histórico barco pesquero en la rotonda de Coia, de ser “nazis” y de imponer su opinión “ejerciendo la violencia”.
A las 9:30 horas de la mañana, miembros de la Asamblea se han concertado a las puertas de los edificios judiciales para solicitar que Silva, que finalmente no ha acudido al acto, se retracte públicamente por estas declaraciones que consideran "inaceptables" de una persona “con su responsabilidad y con cargos políticos”.
La abogada de la Asamblea Aberta de Coia, Esther Lora, ha explicado en declaraciones a los medios que el acto de conciliación celebrado este miércoles ha quedado "sin efecto", ya que la teniente de alcalde “no compareció ni mandó a nadie en representación suya” a pesar de haber sido citada.
Ahora, cada uno de los 39 integrantes de la asociación presentarán una querella penal por la presunta comisión de delitos de injurias y calumnias, y reclamarán 2.000 euros por persona, además de las "disculpas públicas" de la concejala.
Desde la Asamblea Aberta de Coia recuerdan que su lucha por conseguir "una política social de calidad y eficaz" se ejecutó siempre “de manera no violenta”.