El alcalde de Becerreá en funciones y diputado socialista en la Diputación de Lugo, Manuel Martínez, ha reiterado este viernes que sigue aspirando a presidir el organismo provincial, si bien aplaza el debate hasta el próximo día 13 de junio, cuando se componen las corporaciones municipales, al tiempo que ha expresado su respaldo a su homólogo José López Orozco. En la rueda de prensa posterior a la junta de gobierno provincial, Martínez ha señalado que "habrá que esperar al día 13" para decidir sobre la presidencia de la Diputación de Lugo "y también de las otras diputaciones, porque problemas similares hay en todas ellas".
Con respecto a la situación del Ayuntamiento de Lugo ante la negativa del alcalde en funciones, el socialista José López Orozco, a renunciar para favorecer un gobierno de izquierdas con Lugonovo y BNG, Martínez ha respaldado al candidato socialista ante "exigencias que están fuera de lugar".
"Orozco tiene mi apoyo para no renunciar, que haga lo que considere y lo que le asesoren en el partido, pero yo creo que no debe ceder a chantajes", ha dicho tras reconocer que "es cierto que hay manzanas podridas pero no el cesto".
Asimismo, argumentó que "Orozco se presentó como cabeza de lista del PSOE y tuvo el apoyo de un número importante de vecinos y vecinas de esta ciudad, el acta de concejal le fue expedida por el juzgado de Lugo, por lo que no hay ninguna incompatibilidad o ilegalidad que le impida ser concejal o alcalde".
Por otra parte, ha criticado a otras fuerzas políticas que "van de íntegras y puras" y ha apelado a la presunción de inocencia, que "debe mantenerse hasta el final. En este sentido, incluso ha mostrado rechazo a las líneas rojas impuestas por el PSOE. "Que yo no comparto", ha apostillado.
"Si hay condena tiene que marcharse para casa, pero si no la hay, si miramos estadísticamente compañeros de todos los partidos que fueron imputados y luego desimputados sin ninguna condena, de diez casos, nueve con cinco terminan sin condena", ha concluido.
"Motivos familiares"
Por su parte, el portavoz del BNG en funciones en el bipartito de la Diputación de Lugo, Mario Outeiro, ha hecho este viernes un balance "positivo" de sus cuatro años al frente del Área de Cultura, tras anunciar que no repetirá en el cargo por "motivos familiares". Ha destacado de su periplo como diputado el trabajo con el tejido asociativo de la provincia y el impulso a la Rede Museística, siendo la recuperación del legado del mecenas Álvaro Gil el hito más relevante.
"Fueron cuatro años muy intensos y muy interesantes para la provincia, también trabajamos por la lengua gallega e hicimos actividades para todas las franjas de edad", ha manifestado.
Asimismo, ha indicado que esta legislatura sirvió para "dar continuidad al trabajo iniciado en 2007, con una labor muy bien hecha, muy afortunada, encabezada por Antonio Veiga y Antón Bao".
El portavoz socialista en funciones, Manolo Martínez, sostuvo que "Mario se va con el aprecio y consideración de los diputados del PSOE" y aunque reconoció que "hubo algún momento puntual de separación temporal", estos solo duraron "pocos minutos".
Por otra parte, Manolo Martínez aprovechó la rueda de prensa para dar su apoyo a los lucenses "afectados por el desgobierno de la Xunta" que, según ha considerado, les "convierte en ciudadanos de segunda", en referencia a los servicios reclamados para el Hospital Universitario Lucus Augusti (HULA) y el viejo hospital y la falta de plazas de infantil en la zona Sur de la capital lucense.
Por su parte, Mario Outeiro he hecho balance de los convenios firmados en las últimas tres semanas entre el Área de Cultura de la Diputación y organizaciones de los sectores de la lengua gallega, el audiovisual y el patrimonio histórico, por un importe total de 342.000 euros.