La candidata del PSOE a la alcaldía de Coruña y portavoz del grupo municipal socialista en este mandato, Mar Barcón, ha confirmado que el papel de su grupo en esta legislatura será el de "controlar y vigilar" al gobierno de la Marea Atlántica, al ser preguntada si tratarán de formar parte del ejecutivo local.
Tras reunirse con el alcalde en funciones, Carlos Negreira, ha confirmado que, en el encuentro, se ha hablado "por encima" del traspaso de poderes. También ha precisado que ha servido como "toma de contacto" ante el proceso que se inicia ahora, hasta que tome posesión la nueva corporación municipal.
En cuanto a sus contactos con la Marea, Barcón ha confirmado que "en algunas ocasiones" durante estos días ha hablado con su candidato, Xulio Ferreiro; aunque ha reiterado que el posicionamiento de los socialistas pasa por estar donde sean "más útiles".
"Nuestra labor será la de vigilar que sea un cambio seguro", ha dicho. Además, al ser preguntada en varias ocasiones si su intención es formar parte del gobierno local, ha insistido en que su decisión es la de "controlar y vigilar" la actuación del nuevo ejecutivo municipal.
"La ciudad habló y votó mayoritariamente cambio", ha vuelto a incidir la portavoz socialista, quien ha apostillado que no será este partido el que "altere ni traicione la voluntad de los coruñeses".
Continuidad en la corporación
Mientras, al ser requerida de nuevo para que aclare si seguirá como portavoz del Grupo Municipal Socialista, ha señalado que su intención es seguir trabajando "donde sea más útil a los intereses de los ciudadanos".
"Lo que teníamos que hablar se habló en la asamblea", ha manifestado sobre la reunión que mantuvieron este lunes los militantes de la Agrupación Socialista coruñesa para valorar los resultados y en la que, según algunos de sus miembros, faltó "autocrítica".
Expedientes a militantes
A los que piden su dimisión, Mar Barcón les ha respondido que en la asamblea "ya hablamos, ya debatimos y allí quedó". "En seis meses hay elecciones generales y toca colaborar para que Pedro Sánchez sea el presidente del Gobierno", ha recalcado.
Tampoco ha querido pronunciarse sobre la posible apertura de expedientes disciplinarios a militantes del PSOE por comentarios en redes sociales. Así, ha calificado de "cuestión interna" este asunto y ha remarcado que no será "la secretaria general quien vaya a comentarla", ha añadido.