Los políticos apuran estos diez días que falta para la cita con las urnas. Dicen que no les "preocupan" las encuestas, pero todos hablan de los sondeos. Desde las zonas costeras hasta el interior, los líderes de las diferentes formaciones recorren toda Galicia. Porque no quieren fallar. Por eso, y aunque parezca un cuento, se "atreven" a mezclarse con las gentes del común, como ha ocurrido este jueves en la capital gallega.
Nos cuentas los cronistas VIP que los turistas que se desplazaron a Compostela, coincidiendo con el Día de la Ascensión, se "tropezaron" con la campaña del 24-M en la misma Praza do Obradoiro. Y allí, bajo la atenta mirada del "Apóstol", el presidente Feijóo se dio un baño de masas, casi de multitudes. Claro, porque Feijóo, además de ser el jefe del Gobierno gallego, también es el gallego más "televisivo". Y por ahí lo conocen más.
La Alameda compostelana ha sido el centro de campaña elegido por los socialistas. Un marco excelente adecuado por su historia para que Besteiro imparta sus lecciones cargadas de una filosofía "obrera" sobre el código ético. Claro que esta vez en alusión a los populares, aunque sus pensamientos estuvieran más en Caldas. Ya saben. Por si la tenaz juez sienta en el banquillo al candidato del PSOE antes del 24-M.
Recordando años "gloriosos" -que habrá que buscar en los libros de historia-, de fiesta o de feria también estuvieron los nacionalistas, que se han vuelto a "reunir" en Amio. Porque la feria caballar de este recinto santiagués es capaz de "juntar" a apasionados del arte ecuestre, les guste o no el ejercicio de la caballería.