De nada ha servido el "aviso" de la Consellería de Infraestructuras a Audasa, la concesionaria de Autopistas del Atlántico (AP-9), para que pusiera los medios necesarios para evitar retenciones en los peajes. El buen tiempo, coincidiendo con el puente de Semana Santa, ha vuelto a poner en evidencia las "carencias" en la AP-9. Ésta es la particular penitencia que han sufrido miles de conductores que querían este Viernes Santo acceder o pasar por Santiago y Pontevedra. La gran afluencia de viajeros que llegan a estas ciudades para pasar sus días libres ha colapsado las salidas de AP-9 provocando una inmensa cola de vehículos.
De hecho, la Autopista del Atlántico ha registrado en la jornada de este Viernes Santo dos retenciones, una en el peaje de Sigüeiro, situado en Santiago, y otra en el peaje de Curro, localizado en Pontevedra.
En concreto, las retenciones originadas en la entrada a Santiago han tenido lugar en el kilómetro 54 y han afectado a los vehículos que venían de Coruña, según han precisado fuentes de la Dirección General de Tráfico (DGT).
Por su parte, la otra de las retenciones se ha producido en el peaje de Curro, en Pontevedra, donde se enfila la autovía de O Salnés. Así, estas retenciones se han producido en el kilómetro 119 y han afectado a los automóviles que venían del norte.