Los partidos de la oposición (PSdeG, AGE y BNG) han insistido este jueves en exigir la dimisión de la conselleira de Sanidade, Rocío Mosquera. José Luis Méndez Romeu, portavoz socialista, ha criticado, además, la "incapacidad" de la Xunta para organizar las urgencias, mientras que Mosquera se "burla" de los enfermos. Por su parte, AGE y BNG han coincidido en volver a exigir la dimisión de la conselleira por lo que consideran una gestión "nefasta" ante los colapsos en urgencias que se han vivido en los últimos días en diversos centros sanitarios gallegos.
El portavoz parlamentario del PSdeG, José Luis Méndez Romeu, ha cargado este jueves contra la "incapacidad" de la Xunta para organizar los servicios de urgencias de los hospitales, al tiempo que ha censurado la "burla" de la conselleira de Sanidade, Rocío Mosquera, al "echar la culpa de lo que está ocurriendo" a los pacientes "como si no hubiese cada año una epidemia de gripe".
Además, en declaraciones a los medios, ha criticado que, frente a las "protestas continuadas" del personal sanitario, Mosquera "permanece indiferente" y el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, "tolera" la situación de "degradación".
Dicho esto, el socialista coruñés ha subrayado que la "causa evidente" del colapso sanitario que sufren los hospitales gallegos reside en "la supresión de 2.000 puestos de profesionales" sanitarios y en "el cierre de 300 camas".
Dimisión de Mosquera
AGE y BNG han coincidido este jueves en volver a exigir la dimisión de la conselleira de Sanidade, Rocío Mosquera, por lo que consideran una gestión "nefasta" ante los colapsos en urgencias que se han vivido en los últimos días en diversos centros sanitarios gallegos.
En sendas ruedas de prensa en el Parlamento de Galicia, ambos partidos han cargado contra la labor de Rocío Mosquera y del presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, mientras han lamentado la situación "lamentable" que viven numerosos pacientes en urgencias durante el periodo de pico de la gripe, que se encuentran "amontonados" en pasillos y con esperas de varias horas para ser atendidos.
Así, la diputada de AGE Eva Solla ha denunciado la situación "tercermundista" que se vive en la sanidad gallega con profesionales "trabajando en condiciones tremendas" de sobrecarga laboral, mientras Rocío Mosquera y Feijóo "están echándole la culpa a los propios pacientes" por no haberse vacunado. Unos dirigentes que "miran para otro lado" y "trasladan la responsabilidad a la población", arremete Alternativa.
Tras destacar que ha podido ver esta mañana la situación que se vive en el hospital Meixoeiro de Vigo, Solla ha recriminado la labor de Rocío Mosquera, a quien no considera "una persona apta para gestionar un servicio público de salud".
Por su parte, la diputada del BNG Montse Prado ha lamentado la "alarma generalizada" instalada en Galicia por la gestión del Sergas, y deja claro que lejos del "mantra" del Gobierno gallego de que el "caos" creado "es inevitable", el Bloque cree que "sí hay alternativas" y se pueden prever medidas.
En esta línea, Montse Prado pone el foco sobre la situación de los profesionales que están sobrepasados, al tiempo que padecen "presión" y "estrés" que "aumenta el riesgo de cometer errores"; a la vez que los pacientes están viendo "vulnerados" derechos como su dignidad e intimidad.
Entres las exigencias que se hacen a la Xunta se encuentran que abran camas y plantas, que se tomen medidas para que las unidades hospitalarias funcionen con normalidad, se dimensionen las plantillas de profesionales para una correcta atención y se elimine la actual tasa de reposición para que se cubran todos los puestos necesarios.
Recortes y camas
Así, el BNG ha criticado que la sanidad gallega ha perdido unos 3.000 profesionales desde la llegada de Alberto Núñez Feijóo a la Xunta (un 6% menos), mientras que AGE ha cifrado ese recorte en unos 2.000 trabajadores desde 2009.
Asimismo, AGE estima que hay unas 450 camas cerradas en centros públicos, mientras que el BNG apunta que son unas 300, aunque explica que también hay un gran número de ellas "bloqueadas", que no computan como cerradas.
Falta de protocolo
De hecho, el Bloque censura que no existe un protocolo por parte de la Xunta para abordar los picos asistenciales como el de la gripe, una cuestión que Montse Prado ha tildado de "increíble".
Así, demanda un protocolo en el que exista una puesta en común tanto como con el personal de urgencias, así como con los de una atención primaria, en donde "hay lista de espera por mucho que la Xunta quiera negarlo".
Para el BNG, resultan "indignas" las palabras de Rocío Mosquera en las que hablaba de falta de confort para los pacientes. "No estamos hablando de confortabilidad", deja claro Prado, sino de una situación "indecente e inhumana".
También ve "esperpéntico" que Mosquera y Feijóo salgan a pedir disculpas en vez de preocuparse de poner más medios y personal para acabar con "la gravedad" de la situación de las urgencias.
Privatización
Uno de los puntos sobre el que han llamado la atención tanto Bloque como AGE es que el deterioro de la sanidad pública tiene como fin potenciar la sanidad privada, que ven como la gran beneficiada de esta situación.
A este respecto, se pide a la Xunta que se "explique" qué se hizo para evitar "este colapso", cuántos profesionales se han movilizado para solucionar esta situación y de qué modo, cuántas camas y en dónde se han abierto, así como si se han derivado pacientes a la sanidad privada.
"Desvergüenza" con la hepatitis C
En otro orden de cosas, Eva Solla se ha referido a la situación que viven los pacientes de hepatitis C, quien ha cargado contra que el Ministerio de Sanidad va a "esperar" hasta marzo para tener el plan estratégico para estas personas enfermas, que necesitan que el Estado financie una medicación especial para poder tener acceso a ella, "porque la gente está muriendo".
Al respecto, ha informado de que se van a registrar iniciativas para pedir partidas presupuestarias para comprar la medicación, porque si no se tiene acceso a los fármacos es porque el Ministerio fijó "un techo de gasto" de 125 millones de euros, que sólo da acceso al tratamiento para 4.000 pacientes en España, cuando "hay cerca de 300.000 personas afectadas".
Entre otras cuestiones, AGE prepara para este año iniciativas en defensa de la sanidad pública, así como para la cobertura asistencial para todo el mundo, ya que alerta de que según datos de ONGD hay gente "que se está quedando" fuera de ella, "incluso menores".
También apuesta Alternativa por la creación de un laboratorio público de medicamentos, al tiempo que alerta de que el tratado de libre comercio entre la UE y EEUU afectará a la sanidad pública.