La dirección de la planta viguesa de PSA Peugeot Citroën se ha comprometido a presentar a los sindicatos, en la reunión de la próxima semana, un esbozo de su estrategia o plan industrial, para el futuro de la fábrica, en el que se defina "el modelo" de planta hacia el que camina. Así lo han confirmado a Europa Press fuentes sindicales, que han indicado que esa demanda fue planteada por los representantes de los trabajadores en la reunión de este viernes, de la comisión negociadora sobre los ajustes para aumentar la competitividad de la factoría.
"Se están planteando recortes salariales, y queremos saber para qué van a servir", ha indicado Rubén Pérez, de UGT, quien ha señalado que, pese a los comentarios de que la nueva furgoneta (proyecto K-9) ya está adjudicada a Balaídos, "la dirección insiste en que no está garantizada".
Por otra parte, en la reunión de este viernes, la empresa también ha presentado la evolución salarial para los nuevos contratos, y ha confirmado que, con la aplicación del cinco por ciento de rebaja propuesto, los salarios de las nuevas incorporaciones oscilarán entre los 16.250 euros brutos anuales (categoría más baja) y los 34.150 euros (para la categoría más alta).
La empresa también se ha comprometido a "revisar" su propuesta de recortar el 50 por ciento del plus de nocturnidad, y buscar una fórmula de rebaja progresiva, de modo que se penalice menos a los que menos cobran. A ese respecto, los sindicatos han valorado que los recortes en todos los complementos "son susceptibles de ser revisados", aunque la empresa ya advertido de que "quedarse en nada no puede ser, aunque sean menores, habrá recortes".
Denuncia de la CUT
Por otra parte, el sindicato CUT ha anunciado que acudirá a la Fiscalía para denunciar a la dirección de la planta viguesa de PSA Peugeot Citroën, a la que acusa de "coartar el derecho de huelga" y emprender una "campaña del miedo" para impedir que se lleven a cabo los paros convocados por esta central sindical.
Según ha explicado a Europa Press Víctor Mariño, uno de los dos delegados del sindicato en el comité de empresa (integrado por 33 representantes), la empresa está "coaccionando" a los trabajadores para lograr la "desmovilización" de la plantilla. Así, ha denunciado, pretende que no participen en los paros convocados como medida de protesta por los ajustes salariales que plantea la dirección.
Mariño se ha referido a una circular enviada a los mandos jerárquicos de la fábrica, una vez que se hizo oficial la convocatoria de esa huelga parcial. En el escrito, se advierte de que la huelga es "ilegal" por haber sido convocada por una minoría del comité, sin obtener el respaldo del resto de representantes de los trabajadores (de SIT, CCOO, UGT y CIG).
Asimismo, la dirección se reserva la opción de emprender las acciones oportunas para "hacer valer la legalidad", e incluso advierte de que participar en esa huelga es un "ilícito laboral sancionable".
Ante esa posición, la CUT ha confirmado que denunciará esas "coacciones" y "amenazas" ante la Fiscalía. No obstante, y ante el temor a "represalias", ha avanzado que se reunirá en asamblea este sábado para decidir si sigue adelante con la convocatoria.