El exconcejal de Tráfico de Santiago de Compostela Albino Vázquez confesó ante la jueza que instruye la operación Pokémon, Pilar de Lara, que en una reunión del grupo del gobierno local advirtió a sus compañeros del PP de que "no se quitaría ninguna multa". Vázquez Aldrey fue detenido en el marco de la investigación pilotada por el Juzgado de Instrucción número 1 de Lugo. Además de en esta causa, el exconcejal, que dimitió tras su arresto, está imputado en un caso de supuesto acoso y prevaricación a raíz de la denuncia de un policía local.
En su declaración en calidad de detenido, el 15 de febrero de 2013, y a la que ha tenido acceso Europa Press, la jueza pregunta al entonces edil por una conversación de la, de aquella, concejala de Hacienda, Cecilia Sierra, en la que le dice que "le acaban de poner una multa hablando por el móvil" y en la que refiere que "no se entere nadie". También le indica que le van a quitar tres puntos, pero que eso "no le importa", mientras que Albino Vázquez "se compromete a ver si hace algo".
"Siempre suelo decir la misma frase, pero estoy casi convencido de que le quitaron los tres puntos", respondió a la jueza Albino Vázquez, quien también aseguró que él "no" le había levantado la multa. Así, el entonces concejal reconoce que le pedían que levantase multas:
-Jueza: "Pero Cecilia (Sierra) le pidió que hiciera usted algo?"
-Albino Vázquez: "Posiblemente sí, eso es, es igual que los currículos, tengo muchísimas".
-Jueza: "¿Y Reyes (Leis)?" (en referencia a la concejala de Turismo)
-Albino Vázquez: "Posiblemente"
Después de una nueva pregunta de la jueza, el entonces concejal de Tráfico acaba reconociendo que "ahora ya no lo hacen". "Sí, sí, normalmente, vamos a ver, yo, ya, ahora ya no lo hacen, porque ya en una reunión lo hemos aclarado taxativamente que no se quitaría ninguna multa".
El entonces detenido dijo, ante la "sorpresa" mostrada por la jueza de que tuviese que realizar esta advertencia, que lo hizo para "no tener estas llamadas".
Albino Vázquez aseguró que no se hizo "una reunión ex profeso". "En la reunión de concejales de grupo que se hace todos los lunes, pues con un apéndice final, digamos en ruegos y preguntas si procede, lo comenté", explicó.
"Una cosa es lo que se dice y otra la realidad"
En cuanto a si recibió currículos y trató de enchufar a alguien en empresas que contrataban con el ayuntamiento, Albino Vázquez negó que él mediase. No obstante, ante una grabación en la que dice que van a "meter dos o tres" en la concesionaria de la ORA, el entonces detenido aclaró que "una cosa es lo que se dice por teléfono y otra la realidad".
"En las circunstancias económicas en las que estamos viviendo pues yo tengo, no digo semanalmente, pero periódicamente siempre tengo (...) recibo a toda, recibo a muchos vecinos a partir de las ocho de la mañana o las nueve y muchos te traen currículos y te lo ponen encima de la mesa, pero de ahí a que después se intente gestionar o no...", añadió.
A renglón seguido, y tras él mismo indicar que Vigilancia Aduanera se habría llevado "siete u ocho" currículos del cajón de su mesa donde los había metido todavía "en los sobres", Albino Vázquez afirmó que "los que paran" en su despacho "no siguen trámite".
Regalos
El Ministerio Fiscal también preguntó al entonces concejal si eran habituales los regalos de las empresas concesionarias de servicios municipales en la época navideña. "No, no, no, no lo sé, es que no lo sé; lo que sí le puede decir es que nosotros este año lo que hemos hecho fue rechazar por orden, no, por acuerdo, del grupo, rechazar los regalos que vinieron a los concejales", ha contestado.
Este acuerdo se adoptó, según dijo el propio Albino Vázquez a preguntas de la Fiscalía, después del cese como alcalde de Gerardo Conde Roa, que dimitió como regidor al verse involucrado en una investigación por fraude fiscal, por la que finalmente fue condenado.
Préstamos a Patterson
Por otro lado, y en una declaración posterior (de marzo de ese año), confesó que le había prestado dinero al marchante de arte Leonardo Patterson por intermediación de Gerardo Conde Roa y por su relación con el que era entonces alcalde.
Negó que conociese la actividad de Patterson cuando le dejó los 20.000 euros primero, y 10.000, después; y admitió que le pidió a la concejala Amelia González que le ayudase con 30.000 euros, ya que Conde Roa le había solicitado 50.000 para su "cliente". Después le pidió otros 15.000 euros para alcanzar los 25.000 euros solicitados en una segunda ocasión.
