El conselleiro de Economía e Industria, Francisco Conde, ha informado este miércoles de que el Gobierno gallego "no conoce el contenido" del proyecto que ha obtenido más puntuación, el de Hércules de Armamento, para gestionar la fábrica de armas de A Coruña -a falta de adjudicación oficial del Ministerio de Defensa-. Así lo ha apuntado tras reunirse con el antiguo comité de empresa de la fábrica, el cual ha trasladado sus dudas sobre la oferta ganadora, de forma que exige a la Xunta que garantice que no es "un bluf".
En declaraciones a los medios tras una reunión que ha durado alrededor de hora y media, el presidente del antiguo comité de empresa de la fábrica de armas, Roberto Teijido, ha explicado que los trabajadores le han trasladado los "temores" de los exempleados al conselleiro de Economía e Industria, Francisco Conde, y al alcalde de Coruña, Carlos Negreira -presente en la reunión-, de que el Ministerio de Defensa pueda hacer una elección que "sea lesiva para Galicia" con la opción de Hércules de Armamento como adjudicación definitiva.
Así, Teijido considera que es un proyecto que "no tiene la consistencia necesaria para generar empleo y actividad sólida y de futuro".
Al respecto, ha trasladado a la Xunta una serie de informaciones sobre esta sociedad que figuran en el Registro Mercantil, en las que "hay elementos extraños", como que Hércules de Armamento nació en diciembre de 2013 con un capital de 3.000 euros y amplió su capital social hasta los 607.000 euros el pasado mayo. Así, se ha preguntado si con esas características "se puede optar a un proyecto de este volumen", aparte de "quién está detrás".
Por ello, los trabajadores han exigido a la Xunta que "realice las gestiones necesarias" ante el Ministerio para que "contraste" si las sospechas de los exempleados de la fábrica de armas "son ciertas o no". "Nos extraña que en pleno siglo XXI, la Administración no sea capaz de discernir lo que pueda suceder", lamenta Teijido.
En este sentido, Teijido ha explicado que la Xunta se ha comprometido a hacer "gestiones oportunas", después de que el conselleiro, Francisco Conde, al igual que el alcalde de Coruña, Carlos Negreira, hayan apuntado qué desconocen el contenido de la oferta adjudicataria -aunque la elección se prevé que no sea definitiva hasta la semana que viene-. "Hay una nebulosa que hay que descifrar, y creemos que es responsabilidad de la Xunta descifrarla", ha apuntado.
Contra el "bluf"
Preguntado directamente si se teme un pelotazo urbanístico, por los lazos inmobiliarios de uno de los socios de la sociedad adjudicataria, Teijido ha subrayado: "El alcalde lo que nos dice es que los terrenos están blindados porque el Plan General recoge que tiene que ser de uso industrial". Pero ha recordado que hace 17 años "ya quisieron dar un pelotazo con la fábrica de Armas".
Por este motivo, asegura que "es labor de la Xunta" el de "contrastar" que el proyecto industrial "es sólido y viable". "Nosotros estamos convencido de que no lo es", ha censurado.
En contraposición, ha señalado que el otro proyecto, el que obtuvo menos puntuación, de IFFE, apoyado por los trabajadores, es conocido tanto por el Ayuntamiento como por la Xunta, pero "es una cosa muy rara" que el ganador no lo sea.
Antes de que la adjudicación sea definitiva, los trabajadores demandan "prontitud y agilidad" a la Xunta antes de que sea "irreversible", aunque recuerda que "siempre se puede impugnar". También ha puesto en valor que si se ha llegado hasta este momento es gracias al compromiso y lucha de los trabajadores.
En esta línea, Roberto Teijido denuncia que "no es normal" que el lunes "tres horas antes" de que se conociese la decisión de la mesa de adjudicación hubiese "tanquetas de la Policía Nacional en las puertas de la fábrica"; al tiempo que se ha quejado de que el Ministerio Fiscal reactive una querella criminal retirada por General Dynamics contra cinco trabajadores que impidieron la salida de maquinaria de la fábrica.
Por ello, pide "investigar" si existe "una mano negra" en este proyecto. "Estoy convencido que detrás de este proyecto rimbombante es un bluf, no hay nada a nivel industrial".
Además, los trabajadores seguirán manteniendo, por turnos, su protesta ante las instalaciones, una medida que los 61 trabajadores despedidos adoptaron tras el cierre de la fábrica.
"Sensibilidad" hacia puestos de trabajo
Por su parte, el conselleiro de Industria, Francisco Conde, ha remarcado que la Xunta "no conoce el contenido del proyecto final" de Hércules de Armamento. "Y, por tanto, no podemos evaluar este proyecto", ha señalado, aunque espera conocer los datos concretos, si bien ha dejado claro que la mesa de contratación "aún tiene que resolver la propia licitación".
En declaraciones a los medios tras acabar la reunión, ha alabado la labor de los 61 empleados despedidos que "estuvieron trabajando durante todos estos meses" para llegar a este momento "en el que la fábrica de armas tiene la capacidad de desarrollar un proyecto industrial".
Así, Conde indica que "se sigue trabajando" para dar continuidad a la fábrica de armas y "también a los trabajadores", por lo que espera que la adjudicataria "tenga sensibilidad" y que "haya una continuidad de sus puestos de trabajo".
En este sentido, ha mostrado "todo el interés" de la Xunta por poder conocer las líneas del proyecto para poder colaborar, y dado que el Gobierno gallego no está en la mesa de adjudicación "está en la manos de Hércules de Armamento trasladar los detalles" y en el momento de la adjudicación se colaborará con el Ministerio de Defensa.
De tal modo, ha prometido "todos los canales de comunicación" con las partes, con el fin de "garantizar" que el proyecto elegido sea de "calidad" y que "garantice los puestos de trabajo".