El vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, ha reconocido que "se está fallando en cosas" en la lucha contra la violencia machista y se ha remitido a la existencia de víctimas de esta lacra, pero ha rechazado "demagogias", ha llamado a "sumar esfuerzos" y ha anunciado nuevas medidas como la creación de una red de alerta municipal.
"Por supuesto que estamos fallando en cosas, no me duelen prendas en reconocerlo, si no no habría estas cifras", ha reconocido Rueda en una comparecencia en el hemiciclo, donde, entre duras críticas de la oposición, ha defendido al tiempo la labor de las administraciones para erradicar esta lacra y ha pedido "consenso" para seguir "avanzando".
En esta coyuntura, ha reiterado su "enérgica condena" a los casos de violencia machista y ha recordado que, en lo que va de año, 41 mujeres fueron asesinadas en España, seis de ellas en Galicia. Desde 1999, ha añadido que fueron más de 970 las mujeres que perdieron la vida en todo el Estado a causa de la violencia machista, 51 en Galicia, el 5 por ciento.
Tras constatar que esta cifra es "brutal" y que una sola muerte sería "un dato intolerable", ha anunciado en la Cámara nuevas actuaciones como el impulso de un plan para dinamizar la labor que realizan los ayuntamientos en la lucha contra la violencia machista, para crear una red de alerta municipal, "detectar" posibles casos y actuar "antes de que se produzcan".
Frente a ello, los grupos de la oposición han criticado el "discurso fácil y vacío" de la Xunta frente a este "terrorismo machista", en palabras de Carme Adán (BNG) y Consuelo Martínez (AGE). Ambas portavoces en el debate, al igual que Carmen Acuña (PSOE) y Carmen Iglesias, del Grupo Mixto, han considerado "intolerable" la ausencia del presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, de viaje en Bruselas.
En un debate en el que los diputados del BNG expusieron carteles con el lema de que 'el machismo mata' en sus escaños, toda la oposición ha acusado a la Xunta de "reducir" los fondos para medidas de igualdad. La diputada popular Rosa Oubiña y el propio Rueda han negado este extremo, y han defendido que, pese a la bajada de ingresos, se mantuvieron las ayudas, que también estarán "garantizadas" en el presupuesto de 2015.