El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y la canciller alemana, Angela Merkel, han adelantado su visita a la Catedral más de media hora sobre la planificación prevista, posponiendo así su comparecencia ante los medios de comunicación. El adelanto a la entrada del templo, para sorpresa de los medios que cubren el encuentro, se atribuye al intento de evitar una manifestación de protesta contra las políticas de austeridad convocada en la plaza de A Quintana.
La rueda de prensa estaba programada para las 10:30 horas, pero minutos antes, han informado a los medios del cambio en la planificación. Así, Rajoy y Merkel han realizado los metros que separan al Hostal de los Reyes Católicos y la Catedral, por un pasillo habilitado para ello, con media hora de antelación.
En la compostelana plaza del Obradoiro, los dignatarios fueron recibidos este domingo entre silbidos y gritos de "fuera", así como también proclamas en contra de la "troika" y de los "recortes". También al final se escucharon tímidos aplausos, como ocurrió a su salida del hostal y a su llegada al restaurante donde mantuvieron una cena privada.
Este lunes están previstas dos concentraciones, una en la misma plaza del Obradoiro, donde víctimas del franquismo quieren que la canciller pida disculpas por el apoyo nazi al dictador y otra en la plaza de A Quintana, en la fachada trasera del templo, en contra de los "recortes".