Bulo del Gobierno y de la Cadena Ser: "La ONU reprueba duramente las leyes de concordia de PP y Vox en tres comunidades y exige medidas para corregirlas".
Qué vergüenza #PPVox. La @ONU les dice que sus leyes de blanqueamiento de la dictadura son indignas de una democracia como España. #MemoriaEsDemocracia.https://t.co/Od7zxC6Phj
— Félix Bolaños (@felixbolanosg) May 3, 2024
"Qué vergüenza, PP y Vox. La ONU les dice que sus leyes de blanqueamiento de la dictadura son indignas de una democracia como España", ha escrito en su cuenta de X el ministro de Presidencia, Félix Bolaños.
Primer bulo
Como ya anunció el propio gobierno lo que ha hecho es elevar esta cuestión, "por su gravedad", ante el Relator especial sobre Verdad, Justicia y Reparación y el Relator de Ejecuciones Extrajudiciales de Naciones Unidas. Un relator que además fue invitado por Podemos al Congreso de los Diputados. Se trata de un informe de parte pedido para la ocasión, no de la ONU.
Segundo bulo
Pedro Sánchez ha amenazado con llevar al Constitucional las nuevas Leyes de Concordia de los gobiernos de coalición de PP y Vox que presiden Jorge Azcón, Carlos Mazón y Alfonso Fernández Mañueco. Es decir de Aragón, Valencia y Castilla y León.
El gobierno de Aragón ha sido el primero de los tres en derogar la Ley de Memoria pero no tiene ninguna ley aprobada solo un "Plan de concordia democrática, reconciliación, recuerdo y reconocimiento de las víctimas que padecieron persecución o violencia por razones políticas, ideológicas o de creencia religiosa."
Las otras dos comunidades han presentado, de momento, Proyectos de ley de Concordia, el 21 y 26 de marzo.
Las leyes de Concordia
Los tres textos coinciden en el reconocimiento de "todas las víctimas". Dice el plan de Aragón: "La memoria es algo subjetivo y personal y no debe ser objeto de desarrollo legislativo". Reivindican la "historia común, entendida como elemento integrador para la reconciliación combatiendo cualquier intento de quienes tratan de utilizarlas para dividir a los españoles".
La gran novedad que incluyen, como titulaba El País, es: "El PP y Vox presentan en Valencia una ley de Concordia que se remonta a 1931 e incluye "a las víctimas de la violencia del Frente Popular". Esa es la clave. Uno de los nuevos textos habla de "la convulsa Segunda República". Las propuestas de PP y Vox desmantelan el mito de que fue un régimen democrático. De hecho muchos historiadores y republicanos de aquella época apuntan que quien acabó con la Segunda República fueron los propios republicanos de izquierda y extrema izquierda.
Dice el preámbulo de la ley valenciana "La Guerra Civil llevó hasta el paroxismo las dinámicas de enfrentamiento de años anteriores. Por toda España se extendieron los asesinatos masivos, las represalias socioeconómicas, los atropellos de derechos fundamentales y los desplazamientos forzosos de población".
Entre 1931 y 1936 los muertos por violencia política en la República fueron unos 3.500, de ellos 482 en los cinco meses del gobierno del Frente Popular. Además de la persecución religiosa, los Gobiernos decretaron hasta 62 estados de alarma, excepción y guerra.
Otra novedad es que las normas de Valencia y Aragón incluyen a las víctimas del terrorismo "hasta nuestros días". Mazón ha señalado que "sólo en la Comunidad Valenciana hay once víctimas de ETA con crímenes no resueltos".
La violencia de las izquierdas
Como escribe el periodista e historiador Miguel Platón: "El recurso a la violencia nació al mismo tiempo que el proyecto republicano". En el alzamiento de Jaca, en diciembre de 1930, el capitán Fermín Galán difundió un bando que decía:
"Todo aquel que se oponga de palabra o por escrito, que conspire o haga armas contra la república naciente, será fusilado sin formación de causa".
Y en cuanto a los asesinatos masivos de inocentes, en la retaguardia de presos no combatientes, ningún episodio es comparable en toda la Guerra Civil a las matanzas de Paracuellos del Jarama, la mayor fosa común de España, víctimas de las sacas del Frente Popular ocurridas en el otoño de 1936. Se calcula que en las siete fosas del Cementerio de Los Mártires de Paracuellos hay enterradas entre cinco u ocho mil personas, "víctimas de las hordas marxistas", dice una de las lápidas.
En este episodio podremos oír el emocionante relato de Ramón Servert Paez, cuyo padre y abuelo fueron asesinados por los milicianos tras pasar por las checas y cárceles de Madrid. Son muy pocos los hijos vivos de aquellas víctimas del terror rojo y por eso tiene tanto valor su testimonio.
Ramón nació en 1927 y como si fuera ayer se recuerda de niño en la azotea de su casa, María de Guzman esquina Bravo Murillo, viendo el incendio del Colegio Maravillas, el de la Iglesia de los Ángeles, otro en la calle de la Flor, o el la Iglesia de los Dolores… Así se estrena la Segunda República en abril de 1931.
El coronel de ingenieros no puede contener las lágrimas cuando recuerda "el último beso" que le da su padre, un 14 de octubre de 1936. Se va a trabajar al banco y ya no vuelve. Será fusilado en Vallecas. Su abuelo paterno acaba en Paracuellos.
Ramón, como muchas otras víctimas de la barbarie de los partidos y sindicatos izquierdistas, nunca ha querido que sus hijos vivieran la trágica historia de su familia desde el rencor.
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