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Tita Cervera, a su hijo: "O trabajas al menos cinco horas al mes o te quito la herencia"

La Baronesa Thyssen y su nuera, protagonistas de la Crónica Rosa. 

Junguer dijo el día 7 de Noviembre de 2011 a las 15:58:

Seamos sinceros, si nos hubiera dejado 20 millones de euros de herencia el varón Von Thyssen muchos" trabajariamos" para no aburrirnos.

La gente estudia y trabaja con el fin de ganar dinero aún a costa de perder vivencias y mucho tiempo libre, dinero para vivir y disfrutar en los pocos tiempos libres de los que disponen,si ese dinero lo tienen ganado de antemano¿Para que estudiar o trabajar si el fin del trabajo es conseguir un dinero que ya tienes?
Una buena administración y listo.

¿Enriquecimiento personal?¿El trabajo dignifica al hombre? JA.

Lo que enriquece al hombre son las vivencias, la investigación, el estudio voluntario y por placer e inquietud personal sin motivación económica.

Caminant dijo el día 7 de Noviembre de 2011 a las 15:56:

¡Pobre hijo,lo va a matar!...
Con lo que ha trabajado ella en la vida...

gracian dijo el día 7 de Noviembre de 2011 a las 15:32:

Quien da lo suyo antes de la muerte merece que le den con un mazo en la frente...

Ni 5 minutos va a trabajar el andoba.

Ya tiene lo suyo

noldor dijo el día 7 de Noviembre de 2011 a las 14:47:

¿Cinco horas al mes?. ¿Pero qué quiere esta señora?... ¿Que su hijo trabaje de diputado en Cortes? Para que algún partido te incluya en la cabecera de sus listas, hay mucha caña que pelar (eufemismo)... No sea cruel.
Y es que tiene un hijo mas vago que el peluquero de Rubalcaba, que le vamos a hacer...

ANANEWYO dijo el día 7 de Noviembre de 2011 a las 14:36:

Si yo fuera Borja se me caería la cara de verguenza, pero si fuera su madre hace mucho tiempo que habría cerrado el grifo. Ahora es tarde, señora.

ANS dijo el día 7 de Noviembre de 2011 a las 14:01:


Cinco horas al més?

!Qué atracón de trabajo!

Tita no te pases.

Correcam dijo el día 7 de Noviembre de 2011 a las 13:59:

¡Por favor, Señora Baronesa! Lo va a matar. Tenga en cuenta que es su hijo. ¿No le parece mucho cinco horas al mes? Piense en los cinco millones de parados. ¡Qué envidia!