Hugo Chávez ha perdido las elecciones parlamentarias venezolanas, la Mesa de la Unidad Democrática ha conseguido un 52%. Su secretario ejecutivo, Ramón Guillermo Avelado, ha explicado En Casa de Herrero que "esperábamos un resultado muy similar a éste, es la batalla de David contra Goliat y terminaría así".
Avalado ha apuntado que "todavía hay 3 diputados que no nos reconocen, terminaremos con 67". Sobre el futuro, ha indicado que "si nuestros diputados asumen la responsabilidad como esperamos de introducir una alternativa dentro de la constitución guardando el equilibrio pero siendo firmes frente al abuso y el atropello, seguramente empezará un proceso de cambio que culminará en 2012 con un gobierno distinto".
Chávez tardó más de 8 horas en dar a conocer los datos, según Avalado porque "estaban buscando cómo presentar los resultados más maquillados, tratando de ocultar que el presidente es minoría en la votación popular y que había mermado en referencia con las del año pasado, ha perdido más de un millón de votos".
Sobre la posibilidad de un pucherazo, Avalado ha remarcado en esRadio que "no hemos temido nada porque sabíamos que no tenían escapatoria, teníamos las actas y sabíamos lo que había ocurrido". De hecho, "dieron a conocer los resultados lo más de madrugada posible para que la gente estuviese durmiendo, sin embargo todo el mundo estaba viendo aún la televisión y la ciudad ha despertado tranquila, porque todo el mundo sabe que es bueno".
Los resultados no han gustado nada al líder bolivariano, Hugo Chávez, "que a pesar de gustarle mucho los mítines, no dio ninguno en las puertas del Palacio Presidencial como estaba previsto". Según el secretario ejecutivo de la oposición, "a los demócratas no nos cuesta reconocer la derrota, pero a los Dioses es otra cosa".