Cerca de 200 ganaderos de ovino se han manifestado frente a la Consejería de Agricultura, en Valladolid, para exigir la mediación de la Junta para un acuerdo de precios con la industria que cubra costes de producción. El objetivo es alcanzar al menos los precios que perciben en Castilla-La Mancha, una región donde los profesionales del sector cobran 14 céntimos más por el litro de leche, a 0,85 euros, mientras que la media nacional se encuentra en 0,76. Todo ello cuando Castilla y León lidera el ovino nacional, con la producción del 60 por ciento del total de la leche de oveja, estimado en 350 millones de litros. Durante la movilización, convocada por Asaja y UCCL, se responsabilizó de forma directa a la consejera del ramo, Milagros Marcos.
"No es la culpable, pero si la responsable", espetó el coordinador regional de UCCL, Jesús Manuel González Palacín, quien justificó que su departamento otorga ayudas de 125 millones de euros al año a la industria agroalimentaria sin poner condiciones. "No estamos en contra de esas subvenciones, pero deben exigir que para recibirlas, paguen a los productores por encima de los costes, que ahora mismo son de 0,84 euros por litro", incidió.
El sector del ovino de leche atraviesa por una situación "desesperada" desde hace dos años y medio. Un tiempo en el que se pone en juego la supervivencia de 2.250 explotaciones. Con una media de dos trabajadores por cada una de ellas, suman sobre 5.000, más otros tantos de forma indirecta. "¿Qué sector puede aguantar en crisis durante tanto tiempo y poniendo en jaque a 10.000 trabajadores"?, se quejó el líder de UCCL, minutos antes de portar una pancarta bajo el lema ‘Sin precios justos, la ganadería se acaba’, con la que cortaron la calle Vicente Mortes en ambos sentidos.
Además, advirtió a la propia industria de que "se hace un flaco favor a ella misma y se pega un tiro en el pie", pues los "primeros que dejan la actividad al no obtener rentabilidad son los jóvenes, mientras que se quedan los más mayores porque no tienen a donde ir", con lo que evidenció un negro futuro en el sector en la Comunidad.
Igualmente, tanto González Palacín como el presidente de Asaja, Donaciano Dujo, acusaron a Milagros Marcos de no querer publicar el estudio de costes de producción al que se comprometió, para que la industria fijara contratos que no estuvieran por debajo de esa cuantía. "Queremos conocer los parámetros. Si no se hacen públicos, ¿con qué base se podrá exigir un próximo acuerdo?", cuestionó Dujo, quien cargó contra la consejera por "no querer verse obligada a reconocer que los ganaderos se están arruinando". Además, recordaron que el informe supondría una "baza" para acudir al Tribunal de la Competencia frente al "oligopolio" de las industrias. González Palacín también rechazó la actitud de Marcos por no apoyar unas quejas, las que sustentan estas movilizaciones, que servirían "para forzar a la industria". "Si no lo hace, o no lo entiende o no sabe en qué consejería está", trasladó Dujo.
En este sentido, Dujo aprovechó la oportunidad para invitar a la sociedad a hacer caso omiso de las ofertas reclamo con estos productos. "Tienen que saber que cuando compran un queso curado de oveja a bajo precio, a cinco o seis euros, o no es verdad, o no es de aquí o alguien se está arruinando, casi siempre el ganadero", explicó, para añadir que todos los eslabones de la cadena "tienen que ganar". También alertó sobre otro de los productos simbólicos de la Comunidad, el lechazo, deficitario en España, que en algunos casos se abona a tres y cuatro euros el kilo; y arremetió contra la distribución por importarlos desde otros país, con la connivencia de la industria, para arruinar al sector.
Al respecto, animó a los ciudadanos a invertir "en productos de calidad, en alimentación, que es importante", ya que luego "se derrocha".