Cinco integrantes de la asociación Lobo Marley fueron juzgados hoy en Zamora como presuntos autores de la destrucción de unas casetas de avistamiento del cánido en la provincia. "Mantenemos la misma posición de siempre. El lobo es una oportunidad perdida y Castilla y León está perdiendo la maravilla que tiene con este animal y, además, se está cazando de mala manera", aseguró el presidente de la asociación, Luis Miguel Domínguez, a las puertas del Juzgado. "Es verdad que es especie cinegética en Castilla y León y, especialmente, en Zamora, pero también es cierto que se utilizan unos cebaderos y unas casetas de la muerte ilegales, en contra de la Ley de Caza, y eso no puede permitirse", señaló.

Domínguez, quien afirmó que "en este momento, hay decenas de casetas erigidas en diferentes parajes de la provincia de Zamora desde las que se va a matar, sin duda alguna, al lobo en breve", tildó de "indecente" la situación. "No lo puede asumir una sociedad y damos la cara por toda una sociedad. Por la sociedad zamorana, la española y la europea y mundial", sentenció. "No queremos perder esa joya que es el lobo ibérico y queremos que esto se entienda desde el ángulo de la justicia y eso hemos venido a defender aquí", agregó.

Por su parte, el abogado de la acusación particular, Ramón Hernández, consideró "incuestionable y prácticamente reconocido por los propios acusados" durante el trámite de instrucción, que "lo primero que hay que aplicar en este país, y en Zamora en concreto, al margen de la sensibilidad que uno pueda tener, es el principio de legalidad".

La acusación pide una pena de 30 meses prisión y la indemnización correspondiente al importe de las casetas de avistamiento destruidas, unos 5.000 euros, y los daños derivados de ese hecho, es decir, "la imposibilidad de haber podido ejercer la caza de manera reglada como tenía concedida en la temporada cinegética", cifrados en 12.000 euros.