El Seprona de la Guardia Civil de Salamanca identificó a un vecino de 34 años, como autor de la caza indiscriminada de aves protegidas, que además carecía de autorización para la captura de este tipo de aves, por lo que se le considera autor de un delito contra la flora y fauna, como informaron fuentes de la Benemérita.

Durante la investigación se detectó que durante el mes de julio en los extrarradios de Salamanca se llevaba a cabo la caza de aves de la familia de los Fringílidos, especialmente de jilgueros. Los agentes observaron cómo en la parcela colindante con el parque de Ciudad Rodrigo, se habían instalado medios para cazar aves como una jaula con jilguero utilizado como reclamo y varillas de ramas finas impregnadas en una sustancia parecida al pegamento. Al parecer, el autor de los hechos observaba la escena desde una zona cercana a la espera de capturar a las aves que se acercaban, a las que introducía en una bolsa camuflada, que posteriormente escondía.

La Guardia Civil decomisó en el lugar de los hechos el tubo de pegamento-liga, la jaula y la funda de tela, mientras que las aves fueron entregadas en el Centro de Recepción de Aves Silvestres de la Junta de Castilla y León en Salamanca, para su posterior suelta. Las diligencias fueron puestas a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de Guardia de Salamanca.