El Consejo de Administración de Campofrío Food Group ha anunciado el nombramiento del mexicano Mario Páez como nuevo presidente de la compañía, tras la reunión del organismo celebrada el pasado 1 de julio en Madrid. El nombramiento hace efectivo así la sustitución de Pedro Ballvé tras 33 años al frente de la presidencia de la marca de carne burgalesa. Aún así Ballvé seguirá vinculado a la compañía como consejero.
El nuevo presidente ha realizado a lo largo de estos años una labor decisiva en el desarrollo y expansión de la compañía a nivel nacional e internacional. Además, ha sido una "figura clave" en la unión de Campofrío Food Group en Sigma Alimentos y en la reconstrucción de la nueva fábrica de Burgos tras el incendio sufrido en 2014.
El cambio en la presidencia de esta industria no ha dejado indiferente a nadie y ha sido valorada por numerosos responsables sindicales y sociales de la provincia. El responsable del área de Industria de CCOO en Burgos, Juan Ignacio Ruiz, valoró hoy la figura del empresario burgalés Pedro Ballvé a lo largo de estos últimos años dirigiendo la multinacional Campofrío Food Group, tras el anuncio oficial del Consejo de Administración del nombramiento del mexicano Mario Páez como nuevo presidente de la compañía, sucediendo en el cargo a Ballvé, que seguirá vinculado a la compañía como consejero.
En declaraciones a la agencia Ical, Ruiz señaló que el sindicato hace una valoración "muy positiva" sobre la persona de Ballvé "sabiendo que ha sido sino la persona que decidió la reconstrucción de la fábrica de La Bureba si que tuvo un papel muy relevante en la decisión de la compañía de reconstruirla".
Por su parte, el secretario provincial de UGT en Burgos, Pablo Dionisio Fraile, consideró que hoy es "un día triste para Campofrío porque no se va a marchar del todo pero va a dejar de ser nuestro presidente". El también secretario general de la sección sindical de la industria indicó que "hoy es un día triste porque es la persona que ha dirigido los destinos de Campofrío durante los últimos 33 años" y agregó que también porque ha sido "una persona muy vinculada a Burgos" y, sobre todo, "una persona humana a la cual tenemos mucho que agradecer los trabajadores de Campofrío".
Mientras, el presidente de la Confederación de Asociaciones Empresariales (FAE) de Burgos, Miguel Ángel Benavente, consideró un "relevo natural" el nombramiento del mexicano: "Es un relevo natural porque al final coinciden dos cosas: los cambios de accionariados y la edad", declaró a la agencia Ical. Por ello, señaló que "es algo que simplemente es cuestión generacional"
Licenciado en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid (UCM), desde el principio fue el escogido por su padre, José Luis Ballvé, para sucederle en la dirección de Campofrío, la empresa cárnica familiar constituida en Burgos en 1952. Durante su juventud, compagina los estudios con sus primeros empleos, entre ellos, una estancia de dos años en Estados Unidos trabajando en la por entonces socia de Campofrío, Beatrice Foods. En 1978 se incorpora a la empresa familiar recorriendo distintos departamentos de la compañía, desde Control de Calidad, Marketing o Comercial.
Tras el fallecimiento de su padre en 1985, hereda la empresa y su cargo directivo, dando paso a una etapa de expansión, cambios y riesgos. El empresario burgalés asumió las riendas de la presidencia de Campofrío Food Group ese año. En 1988, y con la ayuda del Banco Central, recupera el 50 por ciento del capital de sociedad que Campofrío había vendido a diferentes empresas norteamericanas.
A esto le sigue la decisión adoptada en 1991 de entrar en el mercado ruso bajo el nombre de Campomos, convirtiéndose en la primera cárnica extranjera del país. La presencia internacional se amplía desde finales de los 90 hasta convertirse en una empresa presente en más de cuarenta mercados internacionales.
El siguiente golpe de efecto llega en 2000, cuando Ballvé afianza la fuerza de Campofrío con la compra de sus dos máximas competidoras: Navidul y Óscar Mayer, asegurando así su liderazgo en el sector cárnico nacional. Asimismo se mostró emocionado durante la visita que realizó Felipe VI a las instalaciones de La Nueva Bureba, un moderno complejo fabril, que "demuestra como el fuego no destruyó lo más importante: la ilusión y el compromiso", dijo aquél 23 de noviembre de 2016.
La persona que se comprometió a levantar en Burgos, justo en el mismo lugar en el que se encontraba la fábrica inaugurada en el año 1993 por el rey Juan Carlos I, tuvo un recuerdo para todos los trabajadores que aquella fría mañana del 16 de noviembre de 2014 pensaron haberlo perdido todo. Dotado de un gran humanismo y con un gran espíritu de superación, fueron dos de las muchas cualidades que le caracterizaron durante todo este proceso. Merecedor fue de uno de los premios más importantes que concede la ciudad, el Báculo de Oro 2017, que pone de manifiesto "su entrega por Burgos y los burgaleses".
El propio Ballvé ha declarado que "se siente verdaderamente orgulloso y satisfecho de haber estado al frente de un proyecto empresarial como el de Campofrío Food Group, al lado de un equipo humano de grandísimos profesionales".