Una mujer de 85 años, A. R. R., falleció este miércoles en Valdespino (Zamora), en el municipio sanabrés de Robleda-Cervantes, sin signos de violencia aparente en su cuerpo y en circunstancias que no han sido descritas de forma oficial aunque, según las fuentes vecinales consultadas por la agencia Ical, su muerte pudo producirse durante una quema de rastrojos y hojarasca procedente de los castaños de la zona.
La Policía Judicial de Puebla de Sanabria rectificó a las 16.20 horas la información emitida en un primer momento, cuando se pensó que la víctima era un hombre de mediana edad. "Debido al estado del cadáver por su hinchazón y a la ausencia de pelo, aún no se puede confirmar la identidad hasta la realización de la autopsia. En principio, no se observan signos de violencia en el cuerpo", apuntaron esas fuentes.