El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, apostó este martes en Valladolid por un mix energético en el que tengan cabida energías como el carbón y la nuclear, siempre y cuando prime la seguridad como es en el caso de una posible reapertura de la central de Santa María de Garoña (Burgos).

Álvarez, que intervino en una asamblea de delegados y afiliados en la Feria de Valladolid, apuntó a los medios de comunicación del "gran error" del Estado de prescindir de la extracción de carbón y exigió la máxima seguridad en Garoña. No en vano, consideró que España debe hacer uso de todas las energías posibles para lograr un precio "razonable" para el consumidor, sin olvidar la apuesta por los puestos de trabajos en la instalación burgalesa.

Preguntado por las posibles negociaciones entre el Gobierno de Rajoy y el PNV para cerrar Garoña a cambio de una aprobación de los Presupuestos de 2018, el líder sindical calificó el "cambio de cromos" como un "desastre". No en vano, se mostró un firme defensor de la política como "convicción" y no por cuestiones particulares. En todo caso, no confirmó las informaciones aparecidas en los últimos días sobre este acuerdo.

En cuanto al proyecto político presentado por el ex secretario general del PSOE y aspirante a las primarias, Pedro Sánchez, el secretario general de UGT prefirió no pronunciarse al considerar que es el proceso congresual de una organización autónoma e independiente del sindicato. "Procedo de una cultura sindical que aboga por la absoluta independencia de UGT, sin entrar en que pueda existir más o menos afinidad política", explicó.

Por último, Pepe Álvarez criticó el desprecio "insoportable" del Gobierno con el diálogo en el conflicto con los estibadores. Además, consideró que el Ejecutivo central no tiene necesidad de sacar adelante un decreto en los términos anunciados que es "desproporcionado", pese a las directrices de la Unión Europea. De ahí que defendiera la postura de UGT para garantizar la seguridad en los puertos y declaró que los estibadores no deben "pedir perdón" por tener un sueldo "decente"