Un maquinista detuvo el tren Alvia, con destino Madrid, que llevaba en la estación de Osorno (Palencia) al alegar que había concluido su jornada laboral y que no quería arriesgarse a tener un accidente por exceso de horas. Un total de 109 pasajeros se vieron afectados.
El convoy, que salió con retraso de Santander, no continuó con la ruta sobre las 21 horas cuando el operario detuvo la máquina en dicha localidad palentina, donde en un principio se anunció por megafonía que la detención de este tren Alvia se debía a problemas técnicos.
Posteriormente, Renfe fletó autobuses para cubrir el trayecto de esta línea. Así, los pasajeros que tenían su parada en Palencia y Valladolid tomaron uno de estos vehículos habilitados por Renfe a las 23 horas, mientras que los viajeros con destino Madrid lo hicieron a las 23.30 horas.