El pentacampeón del Tour de Francia, Miguel Indurain, ha analizado en esRadio, en el programa Es Libre y Directo, la edición de este año de la ronda gala, que tiene como máximo favorito al británico Bradley Wiggins y que han diseñado para que la gane un especialista en contrarreloj.
El corredor navarro ha reconocido que físicamente el actual líder de la carrera se parece a él, ya que es un ciclista alto y corpulento, pero, además, adopta una estrategia de carrera muy similar a la suya: "Ha trabajado mucho la montaña y este año ha tenido la oportunidad y ha centrado todos sus esfuerzos en el Tour. Ha copiado un poco mi estilo, ha visto varios vídeos de mis carreras y su forma de correr es muy parecida: hacer diferencias en la contrarreloj y, con un equipo potente, aguantar en la montaña".
El navarro, que cumplía este lunes 48 años, cree que, a estas alturas de Tour, "Wiggins es el favorito porque va primero y tiene un sólido equipo". Además, el recorrido le beneficia porque "estos últimos años los Tours eran más montañosos, quizá excesivamente. Este año han abierto un poco más porque tiene montaña y contrarreloj".
Precisamente, en la lucha contra el crono es donde Wiggins puede abrir una clara ventaja y, en la etapa del penúltimo día, puede marcar diferencias: "Hay que tener cuidado con Wiggins en la contrarreloj", advertía Indurain.
Uno de los mitos del deporte español ha considerado este Tour "duro, disputado, por varias cosas. La primera semana parecía más tranquila y fue durísima porque eliminó a muchísimos corredores por caídas y por tensión. Luego vino los Alpes y ahí se aclaró la carrera, pero todavía no está decidido".
Indurain cree que los corredores españoles han tenido muy mala suerte en la primera semana de carrera y, por ello y por la competitividad, quizá los resultados están siendo más discretos: "Este año se ha llevado a gente muy buena como Samuel Sánchez y equipos potentes, pero la carrera ha ido mal, se ha trabado y ha habido caídas. Hay que saber que es la mejor carrera del mundo y ganar es muy difícil".
El navarro sigue estos días el Tour desde lejos, en su casa, aunque reconoce que preferiría vivirlos subido en la bicicleta: "En la bici se disfruta mucho más el Tour. Son días duros, pero es lo que te gusta", ha concluido.