Sobre el mes de abril del año pasado, a la niña le cambió el carácter y la madre se preocupó. Comenzó a vigilarla, a estar pendiente de ella y de su móvil. Entonces descubrió que su hija de 14 años mantenía una relación con un amigo suyo que tiene 49. La mujer habló de inmediato con la menor, que le reconoció que se había "enamorado". Luego acudió a la policía para poner la correspondiente denuncia. El Juzgado de Instrucción número 7 de Coruña se hizo cargo del caso y llamó a declarar a las partes. La mujer se ratificó en la denuncia. Pero su hija, pese a los intentos de su madre, se negó a declarar contra el hombre, que tampoco realizó manifestación alguna. La juez tomó la decisión de imponerle al investigado una orden de alejamiento y abrir un proceso contra él por un supuesto delito contra la libertad e identidad sexual, señala el diario La Voz de Galicia.
Según la denuncia de la madre, el hombre tenía una gran amistad con ella y con su familia, de ahí que su hija lo conociese. Y en abril comenzó la relación. El intercambio de mensajes entre ambos a lo largo de todo el año pasado, ya en poder de la jueza, fue constante. En ellos, según la jueza instructora, "se puede concluir que existe entre ambos una relación sentimental, puesto que se repite a lo largo de los diálogos los apelativos ‘‘mi amor’’, ‘‘mi vida’’ o ‘‘te amo’’". En otros momentos se refiere la una al otro como "mi novio". "No podemos permitir que nos afecte a nuestra relación", puede leerse en otra comunicación. Además, ambos expresan deseos de "ser una pareja normal".
No solo eso. De los diálogos aportados a la causa se desprende también, según añade el auto judicial, que la menor le envió al investigado un vídeo de contenido erótico. En aquellas conversaciones "queda claro" que ambos se veían por las mañanas antes de que la cría entrase en el colegio. Se veían en un parque próximo y se besaban. También dejan claro que mantuvieron relaciones.
El temor del hombre a ser descubiertos se lo hace llegar a la menor, a la que le indica que borre todos los diálogos y que si algún día lo dejan, tire "el móvil por un lado y la tarjeta SIM por otro". Cuando la madre descubrió los diálogos siguió, acompañada de su pareja, a la cría hasta el colegio, pero de camino se encontraron con el investigado. Cuenta la mujer que se mostró muy nervioso.
La jueza instructora estudia si detrás de esta relación que mantuvo el hombre con la menor existe además un oscuro intento de conseguir material erótico de la niña, por lo que podría ser procesado también por corrupción de menores. La juez instructora está a la espera de que Facebook le envíe los correos que se intercambiaron el investigado y la menor de 14 años.