El alcalde de Coruña, Carlos Negreira, ha llamado a "saborear las bondades" de Galicia en los actos de la Ofrenda del Antiguo Reino al Santísimo Sacramento. De hecho, el alcalde herculino ha sido el encargado de realizar la Ofrenda este año, a la que han asistido varias autoridades, como el alcalde de Lugo, José López Orozco; el Arzobispo de Santiago, monseñor Julián Barrio; y el regidor de Orense, Agustín Fernández Gallego.
También han estado presentes en los actos, el presidente del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), Miguel Ángel Cadenas Sobreira; y el Almirante Jefe del Arsenal de Ferrol, Manuel Garat Caramé, entre otros. En cambio, no ha acudido a esta ceremonia ningún tipo de representación del Ayuntamiento de Santiago.
Esta ceremonia, que se repite cada año en la ciudad amurallada desde hace más de tres siglos, es realizada por las siete capitales del Antiguo Reino de Galicia. En este sentido, los alcaldes de Lugo y de Coruña han hecho "votos" para "seguir manteniendo esta tradición del pueblo gallego".
Los actos realizados con motivo de esta celebración han sido tanto religiosos como civiles. Los primeros han comenzado sobre las 12:00 horas, mientras que los segundos, sobre las 11:15. Durante los religiosos -que han tenido lugar en la Catedral de Lugo-, Negreira ha leído la Ofrenda del Antiguo Reino al Santísimo Sacramento.
"Valores a los avances"
En ella, ha destacado que los gallegos necesitan "darle su verdadero valor a los avances" que han "conseguido". "No sin esfuerzo", ha matizado, justo antes de llamar a "saborear las bondades de una tierra, la gallega, construida sobre la base del trabajo y la perseverancia".
"En esta singular ocasión quiero pronunciar un voto especial por la juventud. Por qué nuestros jóvenes sean realmente herederos de todo ese empeño por construir un mundo mejor", ha remarcado el regidor coruñés.
Sobre el presente, Negreira ha admitido que "vivimos tiempos convulsos". "Tiempos en los que mantener firme el timón no se antoja sencillo por lo turbulento de las aguas", ha indicado.
Asimismo, ha resaltado que, "contra las obstinaciones y los fanatismos", hay que "difundir un mensaje de tolerancia y convivencia harmónica". "Los gallegos, que tantas veces tuvimos que salir al mundo en la búsqueda de un porvenir, sabemos muy bien lo que signifique integrar en vez de separar, compartir en lugar de dañar y convivir en vez de rechazar", ha sentenciado Negreira.
"Cultura de cariño"
En lo que respecta a los actos religiosos, éstos han sido presididos por Julián Barrio, quien ha sido el encargado de responder a la ofrenda. "No continuemos la cultura del descarte", ha pedido, al tiempo que ha abogado por una "nueva cultura de cariño, de solidaridad y de compartir".
Sobre los actos civiles, éstos han tenido lugar en el Consistorio lugués y han acabado con un intercambio de regalos institucionales. Así, el alcalde de Lugo ha entregado a su homólogo herculino una pieza de cerámica de Sargadelos que representa la Muralla, y ha recibido una reproducción de la Torre de Hércules.
Santiago no envía representante
El Ayuntamiento de Santiago no envió ningún representante a la Ofrenda del antiguo Reino de Galicia. La situación que atraviesa el consistorio compostelano, en el que el gobierno local solo cuenta en este momento con dos personas, el todavía alcalde Ángel Curras, que está imputado en la operación Pokémon y que dentro de poco cederá el bastón de mando al anterior conselleiro de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas, Agustín Hernández, y una edil, parece estar detrás de lo ocurrido en Lugo. Sí acudió el alcalde de Orense, Agustín Fernández, también imputado en la Pokémon, y el de Lugo, José López Orozco, también imputado en la misma operación judicial y que ejerció como anfitrión. En nombre de las restantes capitales del antiguo reino participaron la teniente de alcalde de Tui, Vanesa Rodríguez Pereira; la teniente alcalde de Mondoñedo, Esperanza González Martín; y la teniente de alcalde de Betanzos, Mónica Carneiro Cid.