El nuevo Mapa de Infraestructuras y Regadío de Castilla y León contará con un presupuesto de 610 millones de euros para el periodo 2014-2020 con el objetivo de convertir a la Comunidad en una de las más competitivas y avanzadas. La concentración parcelaria de 19.000 hectáreas la mejora y el aumento desde la superficie de regadío son los tres pilares que, según el presidente de la Junta, contribuirán de manera importante a luchar contra la despoblación.
La mejora de la competitividad de las explotaciones que persigue el nuevo mapa de infraestructuras agrarias viene marcada por una mayor productividad, ahorro energético, desarrollo sostenible y una mayor tecnificación del campo. Según el presidente de la Junta, las inversiones del nuevo mapa generarán un valor añadido bruto por hectárea de 3,5 veces superior en las zonas de regadío a las de secano.
El nuevo plan de la Consejería de Agricultura prevé beneficiar a 19.000 explotaciones. El mapa de infraestructura agrarias presentado hoy, viernes 28 de octubre, en Valladolid contempla, por un lado, la concentración de 160.000 hectáreas. También la modernización de los regadíos. 40.000 hectáreas será remozadas con una inversión de casi 300 millones de euros. Juan Vicente Herrera ha puntualizado las prioridades.
El tercer pilar del nuevo mapa es la puesta en riego de 20.000 hectáreas para lo que se destina 200 millones de euros. Lo que permitirá avanzar en zonas como Payuelos, La Armuña y financiar actuaciones en Aranzuelo en Burgos, Valdavia en Palencia, Rituerto y Añavieja en Soria y el Esla Carrión en Valladolid y Palencia. Todo con sistemas eficaces y eficientes. Milagros Marcos, consejera de Agricultura.