Según un estudio realizado en la Universidad de Michigan, por cada hora de sueño extra de una mujer, se incrementan en un 14% las posibilidades de tener sexo al día siguiente. Para llegar a esta conclusión, los investigadores analizaron los hábitos de sueño de 171 mujeres jóvenes durante dos semanas, y las conclusiones de la investigación revelaron que las mujeres que dormían más horas no solo tenían más sexo, sino que también practicaban sexo de mejor calidad y más satisfactorio.
El estudio destaca que el hecho de tener un sueño reparador y regular estimula el ánimo e incrementa la energía y la concentración, además de que produce un aumento de la excitación y del deseo sexual.
Las conclusiones son tan claras que el autor del estudio sugiere que las parejas que tienen una vida sexual pobre, reduzcan en la medida de sus posibilidades sus horas de trabajo, planifiquen una escapada romántica y se dediquen un par de días a dormir a pierna suelta.